La palabra motivación deriva del latín motivus o motus, que significa causa del movimiento. La motivación puede definirse como el señalamiento o énfasis que se descubre en una persona hacia un determinado medio de satisfacer una necesidad, creando o aumentando con ello el impulso necesario para que ponga en obra es e medio o esa acción, o bien para que deje de hacerlo.
Otros autores definen la motivación como la raíz dinámica del comportamiento, es decir, los factores o determinantes internos que incitan a una acción. La motivación es un estado interno que activa, dirige y mantiene la conducta. Por motivación se puede entender, también, la causa de un comportamiento, es decir, aquello que puede determinar las manifestaciones de fuerza, dirección y resistencia. A menudo se emplean otros términos muy comunes, como necesidades, instintos, motivos, deseos etc., para expresar las acciones del individuo. Por eso, se considera que los motivos y las emociones contribuyen a incentivar el impulso que se debe poner en marcha.
Una definición más coloquial en relación a la motivación es la siguiente: la motivación es el “para qué” hacemos aquello que estamos haciendo, la razón última que subyace en todas nuestras acciones. Ésta debe formar una parte importante de nuestra vida diaria y de nuestro entrenamiento.
Para el psicoanálisis existen cuatro tipos diferentes de motivación:
1. Motivación consciente: una serie de fuerzas de las que somos conscientes.
Hacemos algo y sabemos qué es lo que nos ha motivado.
2. Motivación inconsciente: fuerzas internas que nos mueven a hacer algo y no sabemos por qué.
3. Motivación intrínseca: realizamos una acción que tiene el deseo de
satisfacer una necesidad, y la satisface directamente.
4. Motivación extrínseca: realizamos una acción y la satisfacción de la
necesidad se da como consecuencia de esa acción, no se da directamente.
La motivación en el deporte
En el ámbito de la actividad física y del deporte, la motivación es el resultado obtenido de un conjunto de variables sociales, ambientales e individuales que determinan la elección de una actividad física o deportiva, la intensidad en la práctica de esa actividad, la persistencia en la tarea y el rendimiento. Todas estas variables tienen influencia en la persistencia, la intensidad y frecuencia de la conducta deportiva y, a su vez, interacción entre ellas, aumentando o disminuyendo esta conducta.
Presenta gran relevancia descubrir el por qué y el para qué entrenamos, pues, en el caso de la motivación deportiva es uno de los factores más importantes de nuestro entrenamiento: ¿qué es lo que te mueve a realizar las acciones necesarias para conseguir tus metas? En procesos de coaching deportivo, es importante que los factores de motivación sean altos ayudando no solo a captar la atención sobre el objetivo sino, además, a mantener esta atención sostenida en el tiempo.
La motivación está basada en la gestión de las emociones. Debemos buscar las razones profundas que nos hagan tomar decisiones encaminadas a nuestras metas y que sean capaces de mantenernos en ese camino, incluso cuando haya dificultades.
En el caso del deporte, una de las competencias del coach debe ser la de ayudar a su cliente a localizar esa motivación que le dirige hacia su meta y diseñar un plan de acción hacia ella (establecimiento de objetivos a corto y a largo plazo), así como registrar los progresos, incorporar modificaciones en el plan de acción si fuera necesario y reafirmar, a través de la motivación, el compromiso del alumno con sus objetivos.
En el deporte de alto rendimiento, así como en el deporte formativo y recreativo, no solo se entrena el aspecto físico, sino que, también, se tiene en cuenta y se aplica el entrenamiento psicológico, lo cual se configura como un elemento fundamental para marcar la diferencia en los niveles de rendimiento que se alcanzan y en la obtención de ventajas y beneficios derivados de pretender conciliar, de manera provechosa, cuerpo y mente.
Factores que influyen en el estado motivado:
1. Los deportistas: en ellos, podemos encontrar muchas diferencias en
cuanto a su desarrollo motor, al grado de madurez, a la experiencia que
tienen… No todos tienen la misma necesidad de conseguir éxito o de
demostrar su maestría. Un sujeto que demuestre poca seguridad y
cuente con experiencias pasadas de fracaso estará menos motivado que
uno favorecido por el éxito.
2. Personalidad del entrenador: presenta una extrema relevancia el
papel del entrenador, pues éste ha de propiciar un ambiente favorecedor
y un clima adecuado y de confianza, basado en el diálogo, el respeto…
Además, son esenciales la empatía, la tolerancia, la compenetración para
el buen rendimiento de los deportistas.
3. Entrenamiento: el entrenamiento ha de ser motivante, por lo que hay
que integrar elementos que lo procuren así. Dichos componentes
podrían ser la variedad, la novedad e innovación, el riesgo, la
complejidad, el grado de incertidumbre…
4. Materiales: la experiencia será más motivadora en relación a la
cantidad de recursos y materiales a los que los deportistas puedan optar.
– El coaching ayuda a mantener la motivación, a su coachee, de la siguiente
forma:
– Identificando y formulando objetivos
– Convirtiendo deseos y sueños en objetivos y metas
– Ayudando a descubrir el propósito.
– Descubriendo las razones por las cuales se quiere conseguir una meta u
objetivo
– Mediante la visualización, que ayuda a rescatar las sensaciones y emociones
que se tendrán una vez conseguido el objetivo, y permite entrar en un
estado de pensamiento positivo.
– Registrando objetivos y metas.
– Desarrollando planes de acción y poniéndolos en práctica. Con cada paso
que demos, con cada acción conseguida generaremos más motivación.
– Identificando y gestionando las creencias limitantes que nos frenan y
bloquean.
– Gestionando las emociones bloqueantes (miedo y estrés) que nos impiden
avanzar siendo nuestra mejor versión.
Gran explicación sobre la motivación y cómo conseguirla/mejorarla!!
gracias!